🚀 De Lavar Platos en el Bronx a Forjar un Sueño Inquebrantable
Una historia real de sacrificio, resistencia y nunca rendirse
En el 2019 llegué a Estados Unidos con un sueño en el corazón y muchas batallas por delante. Mi primer trabajo fue lavando platos en un restaurante del Bronx: 12 horas al día por apenas $50. El cansancio era inmenso, pero dentro de mí había una voz que me recordaba que ese no era el final de mi historia.
Con mis primeros $200 comencé a hacer Uber… ¡a pie! Caminaba por las calles del Bronx, con todas sus subidas y bajadas, hasta que pude ahorrar $900 y comprar una bicicleta eléctrica. Ese pequeño cambio me facilitó el trabajo, pero lo más importante fue la lección: cada esfuerzo, por mínimo que parezca, te acerca un paso más a tus sueños.
El siguiente capítulo fue trabajar como ayudante en instalaciones de appliances. Ganaba más dinero, pero me sentía vacío. Sabía que ese no era mi lugar. Había algo en mí que seguía empujando: el béisbol aún me estaba esperando.
El viaje que cambió mi vida
En 2021 tomé una decisión arriesgada: vendí tenis para financiar mis estadías y viajé 21 horas desde Nueva York hasta Florida. Allí conocí a Eddy González, quien me abrió una nueva puerta al béisbol profesional, firmando con la Empire League para jugar con el equipo de Tupper Lake.
Ese fue el inicio de mi regreso.
En 2022, tuve la oportunidad de jugar con los New Jersey Jackals en la Frontier League, una de las ligas asociadas a la MLB. Y en 2024, ascendí a la Atlantic League con los Long Island Ducks, otra liga reconocida por la MLB.
El mensaje detrás de la historia
Cada plato lavado, cada kilómetro recorrido a pie o en bicicleta, cada sacrificio… todo tuvo sentido. Porque entendí algo que quiero dejarte a ti que lees estas líneas:
Los sueños no mueren, solo esperan que tengas el valor de perseguirlos.
Esta es mi historia. Pero también puede ser la tuya, si decides nunca rendirte.